Chicotazos

Chicotazos

23 octubre, 2023 0 Por Cuadrante Azul

• Casta de campeón

Por Francisco Javier Flores V.

Joaquín Badillo Escamilla es un hombre en cuyo vocabulario no existe la palabra derrota, su mentalidad no la acepta.

Y es que no se trata sólo de ganar-ganar. Cuando no logra el triunfo, aprende, acumula experiencia y sigue luchando. Así es él.

Si desde niño, aún con su baja estatura, cuando comenzó a competir en el deporte de la natación su sola presencia en las albercas imponía respeto y sus contrincantes sabían que era muy difícil ganarle, ya de joven, primero y como adulto después, enfrentarse a Jacko Badillo en cualquier terreno es sinónimo de tener un hueso duro de roer. Muy duro.

Bien preparado física, mental, espiritual y académicamente; sin vicios, emprendedor, con una estabilidad familiar que muchos quisieran tener y acostumbrado a lidiar contra la adversidad todos los días, el hoy diputado local de Morena por el Distrito 9 de Acapulco está listo para la que será una de sus batallas más importantes, la del 2024.

Este espíritu de lucha, de sacrificio y de saber salir siempre avante, ha podido transmitirlo a sus hijos y haciendo un extraordinario equipo con su esposa Alejandra Mana Zuzuarregui, mejor conocida entre los acapulqueños como “La China”, los han impulsado para que ahora ellos sean destacados deportistas que en varias competencias de natación han puesto en alto el nombre de Guerrero y sobre todo de Acapulco, y que en abril próximo irán a representar a México a un torneo internacional en Colombia.

Joaquín “Jackito” y Jaime Badillo Mena ya pertenecen a esa casta de campeones que con mucho orgullo dan la cara por su patria, al igual que lo hizo su padre Jacko Badillo en 2019, cuando como seleccionado nacional acudió al Campeonato Mundial de Pesca Deportiva en Sudáfrica, trayéndose con su equipo, integrado por otros dos destacados acapulqueños, nada menos que medalla de plata.

Y ahí va tras ellos su hermana menor, Julieta, la pequeña “July”, abriéndose camino igual dentro de la natación, en donde ya se ha colgado también varias medallas.

Así es que cuando alguien pregunta quién es la carta fuerte de Morena para la competencia por Acapulco en el 2024, todas las miradas voltean hacia el mejor guerrero, el más preparado, el hombre de familia, el experto en temas de seguridad, el que ha demostrado un trabajo más que sobresaliente como diputado y trae una trayectoria de lucha, de tenacidad, de esfuerzo por ayudar a quienes más lo necesitan.

No es el que marea con discursos huecos, el que simula que lo siguen miles de personas en redes sociales; no es el que engaña pagando miles de acarreados para llenar eventos sin sentido, sólo para la fotografía, ni el que gasta millones de pesos en publicitar su imagen en espectaculares, traseros de camiones y urvans, lonas o gallardetes en los postes.

Será Jacko Badillo, el de las mil batallas, el que ha competido en lides electorales ganando experiencia y mucha presencia; el que sabe de estrategias de seguridad, el que aborrece a la delincuencia, el que conoce mejor el territorio de Acapulco porque lo ha recorrido una y otra y otra vez, pero no como paseo, sino ayudándole de verdad a la gente.

Por eso será él, Jacko, el auténtico y cien por ciento acapulqueño… el que tiene casta de campeón. Vale.