UNODC urge incluir enfoque de género, pueblos indígenas y medio ambiente en políticas antidrogas

UNODC urge incluir enfoque de género, pueblos indígenas y medio ambiente en políticas antidrogas

14 agosto, 2025 0 Por Cuadrante Azul

Por: Guadalupe Guzmán Rentería

• Hugo Córdoba advierte que la producción de estupefacientes deja daños irreversibles en ecosistemas frágiles
• Critica que se castigue más a consumidores que a traficantes

ACAPULCO, Gro., 14 de agosto de 2025.— El coordinador nacional de programas de drogas de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) en México, Hugo Córdoba Rueda, advirtió que las políticas de combate a las drogas deben incorporar atención diferenciada a mujeres, comunidades indígenas y a los impactos ambientales que deja la producción de estupefacientes.

Durante su ponencia La prohibición e interdicción en política de drogas, en el panel Medio Ambiente y Salud Mental del 22 Congreso Internacional en Adicciones, señaló que estos tres aspectos siguen siendo grandes pendientes en la agenda global, pues las estrategias actuales han privilegiado la represión sobre los factores sociales y ambientales de fondo.

“Atender el tema de las drogas desde una perspectiva de género sigue siendo un pendiente. También debemos considerar a las poblaciones indígenas, atendiendo a su cosmovisión y características, así como a la población en movilidad. Y, por supuesto, al medio ambiente, un tema del que casi no se habla en este contexto”, dijo.

Córdoba Rueda subrayó que el desmantelamiento de laboratorios clandestinos no debe verse solo como un logro, ya que muchos se instalan en ecosistemas frágiles, donde la contaminación por químicos y residuos es letal y rara vez se aplican acciones de saneamiento. “El foco está en desmantelar, incautar y destruir, pero el daño que ya se generó pocas veces es evaluado. En zonas rurales, el crimen organizado acapara los cuerpos de agua, impidiendo el acceso a las comunidades”, puntualizó.

Alertó que la producción de drogas sintéticas y naturales implica un alto impacto ambiental: uso intensivo de agua y fertilizantes, deforestación, contaminación de suelos y ríos, así como grandes volúmenes de residuos tóxicos. Datos de la UNODC indican que cada laboratorio clandestino puede emitir entre cinco y siete toneladas de dióxido de carbono.

También criticó que las políticas de fiscalización y criminalización castiguen con mayor severidad a consumidores que a traficantes. Citó el Informe Mundial sobre Drogas 2025, que documenta que de 6.1 millones de personas que tuvieron contacto con la ley por sustancias, cuatro millones eran usuarios y solo 1.7 millones traficantes. “Al final fueron condenados más usuarios que narcotraficantes, sin ofrecerles tratamiento o reintegración”, señaló.

Insistió en que el abordaje debe basarse en evidencia y estándares internacionales, fortaleciendo a las comunidades como primera red de apoyo y reduciendo la estigmatización. “Entre más prohibición y estigma haya, más se empuja a la gente hacia mercados peligrosos y sustancias adulteradas”, concluyó.