LA POLÍTICA ES ASÍ

19 abril, 2019 0 Por Cuadrante Azul

Taxco, los retos

Ángel Aguirre Rivero

Abril 19, 2019

Las entrañas de la tierra con su riqueza en plata hicieron realidad en Taxco a aquel mítico El Dorado. La construcción de la carretera nacional México-Acapulco (en los años 1925-1927), dejó a la vista de muchos viajeros la belleza arquitectónica de la ciudad; aunado a la naciente actividad artesanal y su clima templado, lo convirtieron de manera natural en un prestigiado destino turístico. En aquellos años, el templo de Santa Prisca y San Sebastián fue uno de sus principales atractivos.
De la mano de don José de la Borda, William Spratling; Juan Ruiz de Alarcón; Raful Krayem; de familias precursoras en hotelería como los Ramírez, Meléndez, Rabadán, Dubin, Amezaga, Checa Kuri y Gerardo López entre otros, pero sobre todo de su creatividad, talento y vocación de servicio, esta ciudad platera se erigió como uno de los vértices del Triángulo del Sol.

Es apasionante la historia de la minería: explotada por los naturales desde la época prehispánica; luego de la Conquista dio riqueza a los españoles que llegaron con su conocimiento para consolidar un modo de vida y una arquitectura que pervive hasta nuestros días y le dan ese aire colonial que pocas ciudades en el país pueden presumir. Las viejas casas de acaudalados mineros se volvieron hospederías y Taxco de Alarcón se convirtió en Pueblo Mágico.
Uno de los personajes más importantes en el surgimiento de Taxco es don José de la Borda, minero español que hizo crecer la extracción del metal plata, con lo cual logró una considerable riqueza y movido por su fe religiosa, en reciprocidad construyó la parroquia de Santa Prisca a la vez que acuñó la frase “Dios darle a Borda, y Borda darle a Dios”. Miles de manos indígenas chontales, tlahuicas, tarascos y mazatecos construyeron en siete años (de 1752 a 1758) esta edificación, que sufrió daños en el temblor de 2017 y que actualmente está en proceso de restauración.
La influencia del catolicismo en la región, da nacimiento a un importante evento todos los años en Semana Santa: los encruzados, quienes hacen penitencia caminando descalzos, vistiendo un faldón negro, con la cintura envuelta en un lazo cabresto a manera de faja, que les ayude a cargar un rollo de espinas de zarzamora verde, cuyo peso oscila entre 30 y 70 kilos.
Existen testimonios como el de José, integrante de una hermandad de encruzados, quien relata la petición que hizo para que una de sus hermanas lograse concebir. Cuando José sentía los estragos de la marcha, desfalleciente, logró ponerse de pie y visualizar la figura de una virgen, tras lo cual recuperó las fuerzas y concluyó la procesión. Al llegar a su casa para ser curado de las llagas que ocasiona la pesada carga sobre su espalda, su esposa le notificó que no había tales, y en su lugar estaba plasmada la figura de un corazón. Meses después se enteró del embarazo de su hermana.
Visitar los pasillos del mercado que se encuentra a un costado de la Parroquia de Santa Prisca, es toda una experiencia sensorial: los olores a hierbas, los colores de los puestos de frutas y degustar la tradicional barbacoa de chivo acompañada de su consomé, son experiencia obligatoria.
Taxco de Alarcón ha sido escenario para la grabación de importantes filmes. Nos relata el acucioso historiador Juan de Dios Labra, que el primero que se rodó en 1932 fue La Sombra de Pancho Villa, con el actor Miguel Torres Contreras; Viva México, dirigida por Sergei Einsenstein; “Macario con el inolvidable Ignacio López Tarso; María Candelaria, protagonizada por Pedro Armendáriz y Dolores del Río; El Peñón de las Ánimas, con María Félix y Jorge Negrete; La Bandida, con María Félix, entre otros célebres filmes.
Como todos los destinos turísticos en el país, esta ciudad enfrenta el reto de ser competitiva, resolver los problemas que trae consigo el crecimiento demográfico y urbano. El contexto es de adversidad por la indefinición de las políticas públicas federales en el sector, la inminente desaparición de Consejo Mexicano de Promoción Turística, y la eliminación del presupuesto a los pueblos mágicos.
Esa sensación de incomodidad permea en los empresarios taxqueños del ramo, sin embargo esto no los detiene, porque a diferencia de otros sitios, la mayoría son oriundos de la ciudad, lo cual les permite aportar entre todos, para algunas acciones de promoción.
Más allá del evento Down Hill que se realiza cada año, hace falta un mayor acercamiento del secretario Rodríguez Escalona para que se involucre en los esfuerzos que hace la ciudad platera, por ejemplo integrarse a un Plan de Desarrollo Turístico o destinar de manera transparente recursos de promoción.
Entre los activos culturales de la región reconozco a nuestro finado cantautor guerrerense Joan Sebastián, las manos artesanas de Tlamacazapa, así como la escuela de diseño que dejaron orfebres en joyería de plata; aunados a las Jornadas Alarconianas, la Feria de Jumil, el circuito Down Hill, el Festival de Guitarra Clásica y las procesiones de la Semana Santa.
Con la llegada de Marcos Efrén Parra Gómez, Taxco tendrá un importante resurgimiento. El alcalde ha puesto en marcha importantes acciones estratégicas, como es el rescate del proyecto de Ciudad Luz que inició durante mi segunda gestión como gobernador; acciones de planificación y reordenamento vial; el estudio y definición de una marca ciudad; el rescate de la identidad, la cultura y tradiciones como um proyecto de reconstrucción del tejido social pero que también genere un circuito de actividades para los visitantes; la definición de estándares de calidad en los servicios y productos de la plata, así como dar seguimento a la creación del Museo de la Plata.Reordenar Taxco, lograr que se reconozca como un lugar de historia con futuro, y perfilarla como un destino cultural, es un plan ambicioso que encenderá lo que él llama “los motores del progreso”. Ese esfuerzo, requiere el apoyo de los órdenes de gobierno estatal y federal. Así sea.

Del anecdotario

–¿Por qué se lacera de esa manera?
–Debo demostrar a Dios que estoy arrepentido y que me perdone.
–Pero Dios no nos quiere ver sufrir.
–Pues sí, pero así me lo enseñaron mis padres.
Se trata de Manuel, uno de los encruzados que participan en la Semana Santa en Taxco.
–¿Desde cuándo participas en esta procesión?
–Llevo más de cinco años y lo voy a seguir haciendo, hasta que Dios me lo permita. Cada año que participo me siento en paz, tranquilo.
–¿A qué te dedicas?
–Soy maestro en una comunidad rural. Y siempre recuerdo las palabras de Borda
–¿Qué dice Borda?
–Dios le da a borda y Borda le da a Dios.Y pues a mí, Dios me ha dado mucho. Yo era alcohólico y drogadicto y gracias a su poder superior ya no bebo, ni me drogo y tengo una familia con la que vivo muy feliz.
–Las heridas que causan las zarzas cuando me autolacero, créame que no las siento, porque Dios está a mi lado.
Taxco es junto con Iztapalapa en la Ciudad de México, donde se celebra con mayor fervor la Semana Santa.
Los penitentes, los flagelantes y los encruzados son sin duda, los personajes estelares.
La vida es así…